Día tras día e insidiosamente, la falta de luz natural en la casa tiene repercusiones inmediatas en la moral y la salud de sus habitantes: humor irritable, pérdida de motivación y cansancio permanente. En una habitación oscura, es fundamental encontrar trucos para hacer entrar la luz y crear una sensación de bienestar. El diseño de interiores permite ajustar esos detalles para que la iluminación y la luz natural promueva un incremento de la iluminación y la mejora del ánimo.
¿Qué factores deben considerarse?
Disposición de la estancia, elección del mobiliario, decoración, colores y materiales. Ciertos reflejos permiten optimizar la iluminación natural para aportar sensación de espacio y ambiente cálido. Siguiendo las premisas y los consejos que aporta el diseño de interiores podrás disfruta de un espacio luminoso donde la vida sea mejor.
En una habitación, cuando faltan ventanas y luz; el ambiente se hace oscuro, poco cálido y bastante frío. Esto, puede ser un factor de malestar diario, siendo la luz necesaria para nuestro equilibrio y buena salud. Por el contrario, una estancia más luminosa ofrece mayor confort y una visibilidad óptima, especialmente en la cocina o el baño. Pues, estas estancias técnicamente requieren la máxima iluminación. Disfrutar de una hermosa luz natural también da como resultado el uso limitado de artefactos de iluminación y un menor consumo de energía. Para ello, el diseño de interiores actúa como un bote salvavidas que permite mejorar las condiciones de cualquier habitación en cuanto a iluminación se refiere.
El diseño de interiores y la luz natural: La entrega del cielo
Es a partir de esta observación que podemos imaginar un reflector de luz para ser colocado en el borde de una ventana o en un balcón. La luz natural es la entrega del cielo y cae verticalmente, como una ducha. Puede pasar por delante de las ventanas sin entrar necesariamente en la casa. Por lo tanto, es necesario captar esta luz para atraerla al interior. Para el aprovechamiento de la luz natural, a través del diseño de interiores, esta solución es ingeniosa y suple la falta de luz en viviendas de planta baja, por ejemplo, o en un piso mal orientado. son múltiples las ideas que aportan claves para lugares carentes de luz.
Luz natural en el diseño interiores: ¿Cómo aprovecharla al máximo en el dormitorio?
Cuando hablamos de diseño de interiores, el dormitorio es una de las estancias de la casa que requiere un cuidado especial. Esta habitación debe diseñarse, desde el punto de vista de la decoración, de forma que confiera el mayor confort e invite a la relajación, lo que la convierte en un pequeño “oasis” donde es bueno relajarse y descansar.
¿Qué colores potencian la armonía de este espacio y qué papel juega la luz natural?
Colores claros: Una apuesta ganadora
Si se quiere dar la máxima importancia a la luz natural mediante el diseño de interiores en el dormitorio, la opción de adoptar una gama cromática clara, tanto para los textiles como para las paredes y el mobiliario, es sencillamente perfecta, ya que aumentará la sensación de amplitud del espacio al reflejar la luz que les llega. Blancos, grises y todos los tonos pastel ayudan a conseguir este efecto; Eso sí, hay que evitar lo aburrido: así que incluye un color más vivo en los pequeños detalles (velas, cojines, cuadros, etc.), que darán personalidad a la estancia.
Las cortinas: Clave para aportar luz al interior
Sin duda, cuando nos enfocamos en el diseño de interiores, las cortinas se tratan de un elemento del dormitorio que incide directamente en la entrada de luz del exterior, por lo que hay que elegirlas con cuidado. ¿Cómo? En primer lugar, el material: debes permitir proteger la privacidad sin tornarla demasiado opaca. Elija telas suaves y aireadas, como lino o seda. Luego, el color: de más está decir que el blanco es la mejor opción, porque aclara el espacio. Por último, el recorte y la forma: aunque la estructura de la ventana no llegue al suelo, el uso de cortinas largas engañará la vista y hará pensar que está tocando el suelo, lo que reforzará, de nuevo, la luminosidad de la habitación y le dará una sensación de amplitud.
Consejo para mejorar la luminosidad a través del diseño de interiores: trata de colocar los muebles lo más lejos posible de la ventana, para que la luz se convierta en un punto focal clave en la habitación.
Espejos: El truco de los profesionales
Utiliza espejos o cristales decorativos o detalles metálicos para que reflejes la luz y le des profundidad a la estancia. El diseño de interiores aúpa el uso de espejos para que la luz natural se aproche al máximo, coloca los espejos justo delante de un punto de luz para multiplicar su efecto.
Además, cuando se trata del aprovechamiento de la luz natural, el diseño de interiores recomienda encarecidamente el uso de espejos en áreas indispensables. En estancias estrechas o con pequeñas aberturas, puedes aumentar la luz natural colocando estratégicamente unos cuantos espejos. Colóquelos siempre frente a fuentes de luz, como la ventana, pero también puedes usar farolas. Si no aprecias sus reflejos, también puedes optar por superficies reflectantes: muebles de madera lacada o barnizada, alicatados claros, marcos en colores vivos. Si se trata de un dormitorio o un escritorio, ¿por qué no apostar por un gran vestidor completamente vestida de espejos? Ganarás así amplios espacios de almacenamiento, todo con discreción.
Sala diáfana: Donde menos se vuelve más
Colocar demasiados muebles en una habitación reduce el espacio y lo hace parecer más oscuro de lo que es, una idea que es contraria a la estética del diseño de interiores. Viste la habitación con lo que sea realmente imprescindible, y que al menos algunos de los elementos sean, como decíamos más arriba, de colores claros para reflejar la luz.
Un diseño de interiores limpio…
Último consejo para aprovechar al máximo la luz natural en tu hogar a través del diseño de interiores es optar por una distribución limpia. Limpia los marcos de las ventanas de cualquier cosa que pueda obstruir la vista y favorece los diseños más simples posibles. Si colocas un mueble frente a la ventana, asegúrate de que esté lo suficientemente bajo para no proyectar una sombra. De la misma manera, coloca los accesorios en el otro lado de la habitación. La única excepción a esta regla: las plantas verdes. Para crecer y florecer, necesitan estar lo más cerca posible de la luz del día. Lo ideal es entonces limitarse a 1 planta por ventana para mantener una buena claridad.